Muchas veces nos preguntamos por las claves que marcan la diferencia, el por qué unas empresas destacan y otras no, el por qué unas empresas con unos productos y expectativas extraordinarias y, sin embargo, otras, en teoría, menos favorecidas destacan.

Si hiciéramos una encuesta es posible que muchos nos posicionáramos en que uno de los factores clave es la calidad de las decisiones que tomaron. Voy a discrepar de este punto, creo que tiene importancia, aunque su transcendencia es pequeña.

Lo que hace que unas empresas vayan “como un tiro” y otras, no tanto, tiene ver directamente con el tiempo, con la suma de tiempos para ser exactos. Así debemos sumar el tiempo que transcurre entre

1. El momento en que se detecta una anomalía / oportunidad / defecto / área de mejora y el momento en que se toma una decisión al respecto
2. Que se toma la decisión y esta se pone en marcha, se ejecuta
3. El momento entre que se ejecuta y se analiza, controla y se toman medidas correctoras.

Que la empresa vaya bien es exactamente proporcional al tiempo que transcurre entre estos momentos. Así, a menor tiempo, mejor irá la empresa, a mayor tiempo, en peores condiciones competitivas se encontrará.

Seguro que algún lector estará pensando

“hombre, si la decisión tomada es nefasta o inapropiada nos llevará en mala dirección”

Totalmente cierto, pero como el tiempo que transcurrirá hasta que nos demos cuenta será pequeño y además, como tomamos decisiones rápidas, las ejecutamos con prontitud y las analizamos enseguida, pronto nos percataremos del error y lo corregiremos.

Por lo tanto, si quieres cambiar el rumbo de tu empresa y conseguir que vaya “como un tiro”: acelera la toma de decisiones, la implantación de las mismas y el control y análisis de resultados. Te aseguro que a medio plazo la mejora será espectacular. Y, si consigues que esto se convierta en cultura de empresa, seréis imparables.

¿Crees que realmente existen otras claves que marcan la diferencia entre empresas?